En la última lección, examinamos la importancia de desarrollar la conciencia, según el libro Extraños a nosotros mismos de Timothy Wilson. Vimos cómo podemos desconocer nuestras propias limitaciones porque estamos demasiado cerca de nuestras propias experiencias para reconocerlas. Enfatizamos la importancia de observarnos a nosotros mismos y lograr que los entrenadores nos ayuden a ser más conscientes. Una segunda lección importante que aprendemos en este libro es que la conexión es importante. Wilson es psicoterapeuta y ayuda a las personas en sus necesidades mentales y emocionales. Afirma que cualquier terapia puede ser útil si se consigue una conexión entre el terapeuta y el cliente.
Wilson dice que la psicoterapia funciona cambiando la narrativa o historia de las personas por el cómo experimentan sus vidas. Para ello esboza tres observaciones:
- “La psicoterapia ha demostrado ser beneficiosa en estudios bien controlados, pero la forma exacta de la psicoterapia parece no tener mucha ”
- “El terapeuta utiliza todas las persuasiones y brinda a sus clientes una nueva narrativa para explicar sus problemas.”
- “Los clientes que adoptan las opiniones e interpretaciones ofrecidas por su terapeuta mejoran más en la terapia.”
“En resumen, la psicoterapia parece ser un proceso beneficioso en el que los clientes adoptan una nueva narrativa sobre su problema y esta es más útil que la historia que contaron antes”.
¿Por qué sería este el caso? ¿Son algunas psicoterapias más útiles que otras? La respuesta es probablemente “sí”: algunas psicoterapias son más efectivas que otras. Sin embargo, lo que Wilson nos señala es algo más fundamental que afecta la efectividad de la psicoterapia: nuestro nivel de creencia de que la terapia sea útil. Si creemos en la terapia nos ayudará y es probable que sea útil.
Uno de los principios fundamentales del material de The Warrior´s Way es la importancia de la conexión. Estamos intrínsecamente interconectados con el mundo que nos rodea, somos una parte de un todo más grande. Muchas de nuestras experiencias, especialmente las experiencias traumáticas, pueden separarnos de ese todo. Por lo tanto, si los clientes creen que los terapeutas están brindando ayuda beneficiosa, se sienten más conectados y la curación puede tener lugar. Hay algunos componentes para desarrollar esta creencia curativa.
Primero, si la relación se desarrolla entre terapeuta y cliente, en esa circunstancia el cliente comienza a sentirse apoyado. En segundo lugar, sintiéndose apoyados, es probable que los clientes hagan lo que los terapeutas sugieren para curarse. En tercer lugar, las acciones que emprenden los clientes les dan experiencias que les permiten entenderse de nuevas maneras. Finalmente, las experiencias de curación mejoran la relación con los terapeutas, lo que lleva a sentirse apoyado y luego le lleva a emprender más acciones. Así se construye un espiral de confianza que desplaza a los clientes de su realidad ilusoria a ser reconectados con la realidad misma.
¿Cómo esto es relevante para el rendimiento en la escalada? Cuando analizamos la experiencia de escalada, vemos partes separadas: escalador, asegurador, roca, etc. Si operamos desde la percepción ilusoria separada de “escalador”, entonces tendremos un desempeño deficiente. No confiaremos en nosotros mismos para resolver las luchas a las que nos enfrentamos, no confiaremos en nuestros aseguradores para que nos hagan una buena parada si nos caemos, no confiaremos en poder resolver las dificultades que encontramos en la roca. Por lo tanto, nos sentimos sin apoyo, aislados y solos, lo que dificulta la participación en la situación.
La “curación” ocurre cuando nos movemos en la dirección a la conexión. Desarrollamos la relación comunicándonos con nuestros aseguradores acerca de cómo queremos que nos apoyen. Esto cambia la forma en que los entrenadores nos entrenan para que el entrenamiento esté orientado de la manera que más nos ayude. Al sentirnos apoyados, es más probable que mantengamos nuestra atención concentrada en la tarea para que podamos actuar. Emprender la acción nos brinda nuevas experiencias que cambian la forma en que entendemos lo que es posible para nosotros. Todo el proceso crea un espiral de confianza que nos ayuda a involucrarnos en nuestras luchas con coraje. Tendremos más probabilidades de confiar en el proceso de resolver las dificultades que encontremos en la roca.
Si nuestros pensamientos nos mueven en la dirección de la conexión, podremos ir más allá de nuestras limitaciones. Nos moveremos de una realidad separada e ilusoria hacia la propia realidad. En lugar de percibirnos como identidades de ego separadas que tienen que luchar con la roca, nos vemos a nosotros mismos como partes de algo más grande y encontramos formas de mezclarnos con ella. Esta perspectiva nos ayuda a integrarnos en el todo más grande. Esto es curativo. Nos sentimos conectados, sabiendo que no tenemos que luchar solos. Podemos contar y confiar en algo más grande que nosotros mismos.